Saba y el poder de las palabras
Si no lo presenciaron, es momento de enterarse, Saba (la marca de toallas femeninas) lanzó el día de ayer a través de Facebook y Twitter una dinámica en el que la mecánica era tomarse una foto con los nuevos tampones “Estilos” para ganarse un iPad. Sin embargo, la campaña que tenía buenas intenciones de reconocer el privilegio de ser mujer tuvo consecuencias inesperadas para la empresa.
En el terreno de las redes sociales y lo viral las situaciones pueden dar giros inesperados. En un espacio donde todos, absolutamente TODOS tienen acceso a la información y libertad para expresarse uno no puede pecar de ingenuo al momento de escribir y mucho más siendo una empresa tratando de hacer marketing en redes.
Y bueno, como decía, lo que empezó como la intención de hacer una dinámica y que éste se volviera viral cumplió su objetivo, pero no por las razones indicadas:
Esta imagen fue el detonante de una ola de comentarios que iban desde lo realmente cómico (debo reconocerlo, si buscan el hashtag de #saba en twitter encontrarán cada comentario…) hasta lo grotesco.
El delicado equilibrio de las palabras, el doble sentido y lo viral
¿Qué esperaban los creadores de esta campaña al mezclar un asunto tan íntimo entre las mujeres y su exposición a las redes sociales? En primera tenemos un mensaje que se puede malinterpretar fácilmente: “¡Tómate una foto con los nuevos tampones ESTILOS con aplicador largo y GANA un iPad… pasa la voz, tu foto debe tener mucho estilo!”
En segundo lugar, estamos en México, un país caracterizado por su picardía y el doble sentido. Una compañía en un país con una cultura así debe tener mucho cuidado con lo que dice. “Piensa mal y acertarás” es un dicho que no puede ser pasado de largo al exponerte ante un público tan grande.
Tomado de la nota de CNN Expansión:
“En tiempo real es muy difícil borrarlo, la gente que lo vio lo puede retuitear aunque tú lo borres. Lo que se debe hacer es revisar las cosas que se postean porque no hay marcha atrás”, dice Lorena González, directora de mercadotecnia de la agencia digital Loikke.
Y así fue, la dinámica se les salió de las manos, la gente se burló, se molestó y volvió viral esta campaña; curiosamente en vez de quitar esta promoción durante las primeras horas viendo la cantidad de comentarios, dejaron pasar todo el día con esta imagen e incluso se presentaron situaciones como ésta:
No digo que sea fácil, cuando un comentario se malinterpreta y todos empiezan a cuestionar, vuelven complicada la capacidad de reaccionar y controlar a las masas. En un intento por continuar con la mecánica a pesar de las críticas Saba ofrecía respuestas casi predeterminadas para hacerle frente. Sin embargo, ya estaba perdida y sólo hicieron crecer el problema.
Al final en la noche, Saba reconoció su error y terminó con esto:
¿Que hemos aprendido de todo esto?
En primer lugar, hay que tener mucho cuidado con lo que se escribe, evitar malinterpretaciones y ambigüedades. Otro punto es que cuando se presentan temas algo delicados como la higiene femenina, hay que tratar de mostrar una idea que resulte cómodo para tus consumidores.
En fin, el daño está hecho y esto debe servir de lección para todos los involucrados en el social media.
¿Ustedes que opinan?
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